Qué bien le quedo a tu cuerpo.

Suave traje, piel de cobra,

al son de flauta,

encantada se revuelve

pronta a soltar el veneno

que la importuna.

Incitación al duelo,

Temeroso,

ansiando la mordedura;

la retardas.

Notas de agua

armonizan la comparsa.

Encantador de serpientes.

¡Qué bien le quedas a mi cuerpo!

A la medida
Patricia Hernández
brujacosmica999@hotmail.com
Publicado el 4 de Agosto de 2007